Cuestión 3.- Los Reinos Cristianos: Reconquista y métodos de Repoblación

LA RECONQUISTA: es un largo proceso de recuperación del domino político-militar de la península ibérica por parte de los reinos cristianos frente a la ocupación musulmana entre los siglos VIII y XV.

Muchos historiadores dicen que el avance de los reinos cristianos fue una verdadera conquista, y no una restauración del reino visigodo.

Tras la ocupación musulmana solo quedaron libres la región montañosa cantabro-astur, el reino de Pamplona y los condados de la Marca Hispánica.

La corona de Aragón extiende la reconquista oriental ocupando el valle del Ebro en el siglo XII y baleares y levante en el XIII. Se paraliza la reconquista un siglo y medio por las querellas internas de castilla.

LA REPOBLACION: es un proceso paralelo al avance militar cristiano que consiste en ocupar o volver a poblar algunas zonas de la península reconquistada a los musulmanes.

Existieron varias modalidades de repoblación según la zona geográfica reconquistada, según la institución impulsora del proceso y según la cantidad de habitantes que existiera. Así, en los territorios mas despoblados predominaron la presura y la carta puebla impulsadas por la corona, en las zonas mas pobladas prevalecieron las capitulaciones y repartimientos a favor de los vencedores cristianos organizados por la corona.

El proceso de inicio a comienzos del siglo IX no concluyo hasta finales del XV, después de la conquista por los cristianos del reino nazarí de Granada. Pueden señalarse varias etapas en el proceso poblador.

En la primera etapa, el sistema de repoblación utilizado fue la presura. La presura consistía en la ocupación de la tierra basada en el derecho romano que decía que quien ocupaba la tierra despoblada y la roturaba se convertía en su propietario.

En la segunda etapa la repoblación es concejil, se forman concejos con un alfoz muy extenso, y a través de privilegios otorgados por los reyes se atraen repobladores del norte. El objetivo de los privilegios y fueros era atraer a nuevos colonos para que se establecieran en al zona. Es el caso de las cartas pueblas, contratos colectivos que fijaban las condiciones para el cultivo de las tierras; los fueros locales, que determinaban los derechos de una ciudad, y las cartas de franquicia, que concedían ciertos privilegios, libertades y exenciones de impuestos.

En la tercera etapa distinguimos dos modalidades de repoblación. En la primera mitad la reconquista avanza rápida y eso hace que se entreguen amplias zonas semidespobladas a las órdenes militares. Estos territorios se dividieron en encomiendas, dirigidas por un caballero de la orden con cargo de comendador.

En la segunda mitad del siglo se producen los repartimientos, las tierras se reparten entre los que han participado en la conquista en función de su posición militar o social. Se aplicaron en baleares, campo levantino, valle del Guadalquivir y Murcia.

También se utilizaron las capitulaciones. Eran acuerdos con las poblaciones sometidas especialmente en las ciudades. A cambio, se respetaban sus leyes y costumbres, parte de sus propiedades y su libertad religiosa; se les imponía contribuciones especiales. A los acomodados se les permitía vender sus propiedades y emigrar; a los modestos se les obligaba a vivir en morerías y trabajar en el campo. Este sistema de colonización se aplica en el valle del Ebro y levante.

CARLOS DONAIRE SERRANO