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jueves, 15 de octubre de 2009

Cuestión 5: Movimiento Comunero-Diana Gómez

Cuestión 5: El Movimiento Comunero

Se puede definir como el levantamiento armado de los denominados comuneros, acaecido en la Corona de Castilla desde comienzos del reinado de Carlos I, y en lo que se conoció como Guerra de las Comunidades.

Los comuneros se sublevaron contra el rey Carlos I tras su elección como Emperador alemán y el establecimiento de impuestos a las ciudades castellanas, así como por la entrega de los principales cargos del reino a los señores flamencos que le acompañaban, provocando una guerra civil castellana. La sublevación empezó en Toledo y se extendió por Segovia, Ávila, Salamanca, Zamora, León y Medina del Campo. Los comuneros añoraban la época de paz y prosperidad alcanzada con los Reyes Católicos, constituyeron la Santa Junta y trataron de obtener el apoyo de la reina madre Juana “ la loca” . La nobleza se desencantó por el apoyo del rey, posibilitando la derrota comunera en Villalar en 1521 y la ejecución de sus líderes Bravo, Padilla y Maldonado. La viuda de Padilla continuó sola en Toledo el levantamiento hasta ser derrotada. Tras la derrota el poder real se fortaleció todavía más en Castilla y las cortes se convirtieron en un simple instrumento del rey. Los realmente derrotados fueron los burgueses y los vencedores.

La sublevación de las Comunidades comenzó en la Corona de Castilla en 1520 cuando se levantarons las principales ciudades castellanas y sustituyeron el poder municipal por comunas, integradas por artesanos, comerciantes y miembros de la baja nobleza y del bajo clero. Las reclamaciones principales eran : el regreso a España de Carlos V, la limitación de los excesos de los consejeros flamencos en sus cargos, la reducción de impuestos y gastos de la Corona, la prohibición de la salida de oro, plata y lana y un mayor protagonismo político de las Cortes.

La aristocracia se mantuvo al margen hasta que los comuneros animaron los movimientos antiseñoriales. La alta nobleza cerró filas con los representantes del monarca derrotando a los comuneros en Villalar, donde fueron ajusticiados sus líderes suponiendo el final del movimiento y asegurando el triunfo del autoritarismo real.

Las causas hay que buscarlas en las dificultades que conoce Castilla desde principios del siglo XVI y en los cambios políticos que supone el advenimiento de los Austrias.

El siglo XVI empieza con malas cosechas, hambres, epidemias y una fuerte subida de precios. Ante la crisis se rompe el equilibrio que los Reyes Católicos habían logrado mantener entre las regiones del reino.

La situación política, impide que los gobernantes presten a tales dificultades la debida atención.

En 1516, Don Carlos, se proclama rey de Castilla. Este causa mala impresión: no habla castellano, viene rodeado de una corte de consejeros flamencos que se reparten los cargos. En 1519, Carlos es elegido emperador y decide marchar a Alemania. El regimiento de Toledo toma entonces la iniciativa de una campaña nacional, primero contra los impuestos que la corte pretende subir para sufragar los gastos de la coronación imperial y luego contra la misma política imperial.

En 1520 se produce la convocatoria de las Cortes. Las ciudades protestan contra los impuestos que el rey quiere exigir antes d su partida. Castilla no quiere sufragar los gastos del imperio.

Don Carlos no hace caso a tales advertencias. Reúne Cortes logrando convencer con dádivas y presiones a una mayoría de procuradores que consienten en vota el servicio y después se marcha rumbo a Flandes y Alemania, dejando como regente y virrey al cardenal Adriano de Utrech.

Ese fue el momento de arranque de la sublevación iniciada en Toledo y con una capacidad de fuerza inicial irresistible fue ganando para la causa a la mayoría de ciudades castellanas. Adriano de Utrech se mantuvo en Valladolid, mientras que los sublevados organizados en Junta exigían de Carlos un acuerdo firmado con los siguientes puntos: Carlos gobernaría como “rey de Castilla”, evitar la salida de oro, plata y materias primas de Castilla, y finalmente recuperar el papel de los castellanos en el gobierno de la nación , alejando a los favoritos flamencos que había sido designados para ocupar puestos ejercidos por castellanos tradicionalmente.

Los nobles se pusieron de acuerdo con el movimiento, pero cuando se observó el cariz político que tomaba se alejaron de él temerosos que fuera un primer paso para perder sus privilegios.

Se unieron bajo la Junta de Ávila las ciudades de Toledo , Ávila, Salamanca y Segovia. Aún así el apoyo al levantamiento fue relativo, y fue el incendio de Medina del Campo por parte de las tropas realistas, lo que incendió toda Castilla, haciendo que muchas ciudades se adhirieran a él. La Junta se traslada a Tordesillas, donde a la sazón residía la reina doña Juana la Loca, y allí se reúnen, trece de las dieciocho ciudades que tienen voz y voto en las cortes.

Durante el otoño de 1520 la aristocracia castellana, se siente amenazada por el movimiento comunero.

La respuesta real se tradujo en una “marcha atrás! De las medidas mas impopulares y en un acercamiento a los nobles que no veían con buenos ojos la sublevación. Esto debilitó el poder comunero. La solución armada se asomó en la batalla de Tordesillas (diciembre 1520) donde el ejército real obtuvo una victoria que mostró la debilidad de la Junta, liberó a la reina Juana del control de los comuneros y provocó el abandono de algunas ciudades a la causa.

Antes de acabar el año, los comuneros se reorganizaron y recuperaron la moral perdida como lo demuestran las acciones militares en Tierras de Campos y Burgos y las acciones del obispo Acuña entorno a la provincia de Toledo , aunque recuperó la iniciativa con la victoria en Torrelobatón.

La batalla de Villalar fue el episodio decisivo de la guerra, donde los comuneros capitaneados por Juan de Padilla, Juan Bravo y Francisco Maldonado , fueron derrotados por las fuerzas imperiales, poniendo fin a la sublevación comunera en el norte de Castilla tras la decapitación los tres capitanes comuneros. Toledo con María Pacheco resiste durante meses, pero tiene que someterse y Pacheco tiene que exiliarse a Portugal.

Carlos I regresó a España, instalando la corte en Palencia. Con el regreso del Rey, la represión contra los comuneros avanzaría a un ritmo mayor como lo demuestra la ejecución de Pedro Maldonado.

Carlos I permaneció en Palencia hasta finales del mes de Octubre, trasladándose a Valladolid, donde el 1 de noviembre se promulgó el Perdón General.

Las consecuencias fundamentales del movimiento comunero fueron:
· Perdida del poder de la élite política de las ciudades castellanas, obligada a pagar las indemnizaciones para aquellos que perdieron bienes o sufrieron daños en sus posesiones durante la revuelta por apoyar la causa real. Éstas serían abonadas mediante un impuesto especial para toda la población de cada una de las ciudades comuneras.
· Antes estos impuestos, la industria textil del centro de Castilla perdió todas sus oportunidades de convertirse en una industria dinámica.
· La nobleza queda identificada con los intereses de la Monarquía, pero quedó clara su subordinación como súbditos y afianzó el autoritarismo del Rey.

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